SUSTENTABLES | La primera escuela sustentable argentina cumple 1 año- RED/ACCIÓN

SUSTENTABLES | La primera escuela sustentable argentina cumple 1 año

 Una iniciativa de Dircoms + RED/ACCION

El grave estado de deterioro de la naturaleza nos recuerda la importancia de involucrarnos. Esta vez desde las escuelas. Pero también generando conciencia a los candidatos y observando los fallos en USA contra Monsanto.

SUSTENTABLES | La primera escuela sustentable argentina cumple 1 año

Imagen: unaescuelasustentable.com

La semana pasada el informe de IPBES sobre el grave estado de deterioro de la naturaleza nos dejó un sabor amargo a muchos, pero también nos recordó la importancia de involucrarse para modificar la situación. ¿Qué mejor que comenzar con esa oportunidad de toma de conciencia y acción en la escuela? Y no en cualquiera escuela, sino en una construida especialmente bajo principios de sustentabilidad…

Imagen: unaescuelasustentable.com

1. Cuando educación y arquitectura van de la mano: 1° año de la escuela sustentable argentina

Hace tres años viajé a Uruguay y fui a conocer la primera Escuela Sustentable de América Latina. Llegué a la localidad de Jaureguiberry y vi con mis propios ojos aquella construcción sobre la que había leído y escuchado: un Earthship, una NaveTierra, una construcción donde los residuos son recursos y donde los recursos se respetan, se cuidan, se aprende a convivir con ellos en armonía.

Me recibió Alicia, su directora. Ella fue mi guía para explicarme cómo las características sustentables de la edificación contribuyen a diario en la educación de los alumnos. Esos alumnos que se convirtieron luego en mis docentes para enseñarme cómo funcionaba la huerta orgánica, cómo estudiaban a diario, por qué la temperatura interior siempre estaba estable. Si en ese momento hubiese podido volver a ser chica, definitivamente hubiese elegido estudiar ahí.

En marzo del año pasado viajé a Mar Chiquita, provincia de Buenos Aires, y conocí la etapa previa a ese maravilloso mundo de la escuela sustentable: el de la construcción. 200 voluntarios nacionales e internacionales se sumaron a la Academia del arquitecto norteamericano Michael Reynolds para dar vida a la primera escuela sustentable de Argentina, la escuela pública N°12, que mañana, 16 de mayo, cumple su primer año en funcionamiento.

A Reynolds, que es el padre fundador del concepto de Earthship, le pregunté cómo lo explicaría: “La definición breve de un Earthship es que es una base para los humanos en este planeta. Esa base encuentra los fenómenos naturales del planeta para la sustentabilidad de las personas. Hay que comprender el concepto detrás de esto: hay energía en el cielo, aprovechala; hay lluvia que viene del cielo, aprovechala”.

Para los cimientos de la escuela sustentable argentina se reutilizaron más de 2.000 cubiertas, 4.000 botellas y 800 latas. Ese es el primero de los siete principios que definen a un Earthship; los otros: cosecha de agua de lluvia para disponerla en otros usos; reutilización de las aguas al interior de la escuela; empleo de energías renovables, con paneles fotovoltaicos; acondicionamiento térmico pasivo con una temperatura promedio de entre 18 y 25°C; producción orgánica de alimentos a través de una huerta interior y otra exterior; desarrollo del factor humano, involucrando a docentes, alumnos y a la comunidad aledaña.

Durante este primer año en funcionamiento, más de 90 niños y niñas de entre seis y 12 años asistieron a la escuela. Tanto ellos como los docentes recibieron formación en sustentabilidad y la vivieron día a día gracias a las características del Earthship. Además, se realizaron más de 20 talleres abiertos a la comunidad para expandir el mensaje.

Así como directora y alumnos me recibieron en Uruguay, en Mar Chiquita sus protagonistas han recibido a más de 10.000 personas durante este año para explicarles este fenómeno que combina arquitectura sustentable y educación para la sustentabilidad.

El proyecto fue posible gracias al trabajo conjunto del gobierno local, empresas y organizaciones sociales; actores fundamentales para que la idea se replique en más ciudades del país y favorezca al presente y futuro de más niños y niñas.  

2. Récord de emisiones y un día para recordar la necesidad de actuar (todos los días)

Un récord que no es del bueno. El pasado fin de semana las concentraciones en la atmósfera de dióxido de carbono (CO2) -principal gas de efecto invernadero contribuyente al cambio climático- alcanzaron una cifra sin precedentes: más de 415 ppm (partes por millón). El dato se desprende del Instituto Scripps de Oceanografía de la Universidad de California, San Diego. Es la primera vez en la existencia del ser humano que se alcanza esa cifra. Recordemos que las emisiones provienen de actividades humanas como la explotación de combustibles fósiles, el transporte  y la deforestación, entre otras.

Quizás por ese dato récord es que la fecha que nos convoca hoy es más que importante. Cada 15 de mayo se celebra el Día Mundial de Acción por el Clima, una oportunidad para generar conciencia sobre el impacto de nuestras actividades en las variaciones del clima y la necesidad de modificar la situación cuanto antes. Guiada por el Acuerdo de París -principal documento consensuado por los países para hacer frente al cambio climático-, la principal acción hoy se concentra en modificar el actual sistema de producción basado en la explotación de combustibles fósiles a otro basado en fuentes renovables.

¿El recordatorio de cada newsletter para que vos actúes ante el cambio climático? Consumí productos locales, priorizá el transporte público por sobre el vehículo particular, comé menos carne y más vegetales, utilizá la energía sólo cuando es necesario, informáte a través de documentales y artículos periodísticos, hacé sentir tu voz sobre el tema en las redes sociales, exigí a los candidatos políticos que presenten sus propuestas para actuar ante el cambio climático y votá a conciencia…

3. Se develó el misterio: ¡la naturaleza se suma a la campaña política!

Afiches de campaña con mensajes poco tradicionales sobre un fondo color verde aparecieron silenciosamente por las calles porteñas para hacer ruido. La única pista: #NTZ2019. Luego de semanas de intriga, finalmente se dio a conocer la identidad del candidato: la NaTuraleZa se suma a las próximas elecciones en territorio argentino.

La campaña ideada por las organizaciones Conservation Land Trust (CLT) y Fundación Flora y Fauna busca generar conciencia sobre la importancia de la naturaleza como instrumento de crecimiento y desarrollo, y la necesidad de conservarla a través de la creación de áreas protegidas. Su lema es claro: debemos votar por la naturaleza. Su propósito es tan simple como complejo: que el cuidado de la naturaleza y la creación de áreas protegidas sean temas de discusión durante la campaña. Sus protagonistas: los animales que habitan el país.

¿Importa esto a los votantes? Una encuesta de Elypsis reveló que 8 de cada 10 argentinos apoyarían a un candidato que promueva nuevas áreas protegidas. ¿Es la naturaleza una simple candidata con impacto en lo ambiental? Por supuesto que no. Según las organizaciones, “ella es verdadera creadora de empleo y oportunidades para las economías regionales”. De hecho, las áreas protegidas tienen el potencial de crear 300.000 puestos de trabajo en 10 años e incrementar los ingresos de turismo.

El último interrogante que nos queda es uno: ¿escucharán los candidatos el grito de la naturaleza? Quizás pueden empezar informándose aquí. El dato a no olvidar: la naturaleza trasciende las banderas políticas.

4. Monsanto, cáncer y un nuevo fallo que deja huella

Después de años de argumentos encontrados, de críticas y defensas, y de una llamativa compra de la compañía que pasó a manos de Bayer, la justicia comienza a dictar veredicto sobre la incidencia de los productos de Monsanto en la salud humana. Ayer un juez de Estados Unidos condenó a la empresa a pagar más de 2.000 millones de dólares a una pareja enferma de cáncer. La causa de la enfermedad se encontraría, para la justicia, en el contacto con el herbicida estrella de la compañía a base de glifosato: el Roundup.

Se trata de la tercera vez que la justicia estadounidense dictamina a favor de los ciudadanos que utilizaron sus artículos y contrajeron la enfermedad, y en contra de Monsanto. Al momento, hay más de 13.000 demandas por el mismo motivo, sólo en Estados Unidos. El Roundup se continúa vendiendo sin una advertencia sobre el riesgo cancerígeno para los humanos. En Argentina, es uno de los principales químicos que se utiliza en el campo.

Si te interesa conocer más sobre el tema te recomiendo ver “El Mundo según Monsanto”, un documental realizado por la periodista y escritora francesa Marie-Monique Robin.

5. ¿Cuánta basura generás? Un interrogante cotidiano para modificar hábitos

Y un interrogante que se hicieron la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el Observatorio de Higiene Urbana de la ciudad de Buenos Aires. Para conocer la respuesta emprendieron un proyecto basado en el muestreo colaborativo, es decir, que sean los propios ciudadanos los que proporcionen la información a través de la separación de la basura en sus hogares durante siete días y la posterior carga de datos.

La experiencia de “ciencia ciudadana” busca no sólo tener mayor conocimiento sobre la cantidad y tipología de generación de basura en Buenos Aires, sino también generar conciencia en la ciudadanía sobre la reducción, la separación y el reciclaje de residuos. Luciana Coraggio indagó más en la iniciativa y te explica cómo sumarte en esta nota en RED/ACCIÓN.

6. Habemus 7 maravillas naturales argentinas 🙂

Mientras recibías la newsletter la semana pasada, se publicaron los resultados de la votación popular con las Siete Maravillas Naturales de Argentina. Y… las ganadoras son: Salinas Grandes (Jujuy), Glaciar Perito Moreno / Parque Nacional Los Glaciares (Santa Cruz), Parque Nacional Talampaya (La Rioja), Selva Misionera (Misiones), Río Mina Clavero (Córdoba), Parque Nacional Nahuel Huapi (Neuquén/Río Negro), Bañado La Estrella (Formosa).

Un consejo: buscá imágenes sobre estos lugares. En sólo siete elegidos se puede apreciar la rica biodiversidad con la que cuenta nuestro país. ¡Una maravilla global con todas las letras! Muchos me preguntaron cómo no estaban Las Cataratas del Iguazú entre las ganadoras. ¡Tranquilos! Fueron elegidas como una de las siete maravillas naturales del mundo y por eso se las sacó de la votación nacional.

La selección final fue realizada por el público a través de una votación digital, luego de distintas etapas. El concurso fue impulsado por la fundación New 7 Wonders.

Más allá de la competencia y las finalistas, lo importante es el objetivo central: dar a conocer la belleza natural de nuestro país para cuidarla, protegerla y conservarla, y promover el turismo responsable hacia esos lugares. Así que ya sabés, en la próxima planificación de viajes, tenés al menos siete destinos maravillosos donde entrar en contacto con lo natural.

7. Ser sustentables: y educar para la sustentabilidad  

Lamentablemente no todos tienen la oportunidad de ir a clase en un Earthship, pero sí creo que en cualquier escuela se puede empezar a impulsar pequeños cambios para que la sustentabilidad sea protagonista en su día a día. Si sos padre/madre y tenés hijos en edad escolar, si sos docente/profesor y das clases, si sos alumno, o simplemente si podés contribuir desde tu rol, aquí algunos consejos basados en las recomendaciones de UNESCO para promover la educación para el desarrollo sostenible:

  • Incluir en los contenidos de la cursada temas esenciales como el cambio climático, los modelos de producción y consumo sostenibles, y la contaminación, entre otros. Integrarlos de forma transversal, no como un contenido aislado de la currícula sino en relación con las otras temáticas.
  • Concebir la enseñanza de un modo interactivo promoviendo un aprendizaje exploratorio, transformativo y orientado a la acción. ¿Es lo mismo explicar en un pizarrón lo que es una huerta que alentarnos a armar una en el patio de la escuela?
  • Facilitar y acompañar la transformación social de los alumnos, tanto de sí mismos como de la comunidad en la que viven. Alentarnos a ser miembros activos, a ser pequeños líderes de cambio que concienticen a otros y promuevan cambios de acción.

Hay una idea que vengo sosteniendo desde la primera edición de SUSTENTABLES y es que cada pequeña acción que cada uno de nosotros pueda realizar cuenta para el objetivo final de realizar impacto positivo. En tiempos donde los reportes científicos evidencian que muchas cosas las estamos haciendo no mal, sino muy mal; es fundamental comprender la oportunidad, necesidad y responsabilidad que tenemos de involucrarnos para alentar cambios transformadores.

Como una escuela-Earthship que se construye en equipo, cada ladrillo (o mejor dicho cada botella o neumático reutilizado) tiene un rol fundamental en el proyecto final. Pero lo que es aún más importante, cada persona que la frecuenta, la disfruta, la conoce puede hacer su aporte, incluso subida al techo de la escuela sustentable de Mar Chiquita durante su construcción para escribir luego un artículo. El desarrollo sostenible sólo podrá ser un sueño alcanzado si todos asumimos nuestro rol, como docente, como alumno, como experto, como padre o madre, como comunicador, como lector y difusor, como ciudadano... ¿Cuál es el tuyo?

Hasta el próximo miércoles!

Tais

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Información para actuar y cuidar al planeta. Todos los miércoles, por Tais Gadea Lara.

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