Una idea radical para evitar el derrumbe de edificios ante una catástrofe
Un nuevo diseño de edificios, inspirado en cómo las lagartijas pierden su cola para sobrevivir, evita colapsos en cadena al aislar los fallos iniciales. Este diseño, probado en un edificio a escala real, garantiza que las conexiones fallen antes que las columnas, preservando el resto del edificio y permitiendo rescates seguros tras eventos extremos.