La gigante compañía de Noruega, Equinor, anunció que comenzó a generar energía la primera turbina de lo que será el parque eólico offshore más grande del mundo. El inmenso aerogenerador de 13 MW entró en operaciones y es el primero de los 277 que se instalarán y permitirán alcanzar los 3,6 GW que tendrá el desarrollo offshore cuando se finalice.
Se trata del parque eólico Dogger Bank, ubicado a 130 kilómetros de la costa de Yorkshire en el Reino Unido. El proyecto tendrá tres etapas de 1,2 GW cada una y se espera que esté 100% operativo en 2026.
El proyecto es un hito más allá de su tamaño y es que la energía se transporta a la red nacional del Reino Unido a través del sistema de transmisión de corriente continua de alto voltaje (HVDC), lo que marca el primer uso de la tecnología HVDC en un parque eólico de esa región.
Para tomar dimensiones de cómo será el proyecto, las turbinas de 13 MW miden 260 metros de altura y las aspas unos 107 metros cada una. Cada rotación de las aspas puede producir suficiente energía para alimentar un hogar británico promedio durante dos días.
La primera energía se produjo tras la instalación de la primera turbina Haliade-X de 13 MW de GE Vernova, una de las más grandes y potentes del mundo. Esta es la primera vez que las unidades Haliade-X se energizan en alta mar en cualquier parte del mundo.
Equinor, operador principal del parque eólico, mantendrá y hará funcionar el Dogger Bank durante su vida útil prevista de 35 años. Las tareas se realizarán desde la base de operación y mantenimiento recientemente inaugurada en el puerto de Tyne.
Este centro logístico albergará alrededor de 400 puestos de trabajo, incluido personal del parque eólico Dogger Bank, Equinor, GE Vernova y North Star.
Dogger Bank se encuentra aproximadamente a 130 kilómetros de la costa de Yorkshire y ocupará un área casi tan grande como la región conocida como el Gran Londres y casi el doble del tamaño de la ciudad de Nueva York.
Cuando esté completamente terminado, su capacidad de 3,6 GW comprenderá 277 turbinas marinas capaces de producir suficiente energía para alimentar el equivalente a seis millones de hogares británicos al año.
Cada una de estas turbinas se instalará y pondrá en funcionamiento progresivamente desde ahora hasta su plena operación comercial prevista para 2026. Cuando esté terminado, Dogger Bank será más de dos veces y medio el tamaño del actual parque más grande en funcionamiento, ubicado en la misma región.