La Rinconada: una playa tranquila y con buenos piques sobre el acceso norte a Las Grutas - RED/ACCIÓN

La Rinconada: una playa tranquila y con buenos piques sobre el acceso norte a Las Grutas

 Una iniciativa de Dircoms + RED/ACCION

Bordeada por un alto acantilado, es uno de los sitios elegidos por los amantes de los buenos piques, que encuentran en su costa el hábitat de pejerreyes, sargos y pesca variada.

La Rinconada: una playa tranquila y con buenos piques sobre el acceso norte a Las Grutas

Una playa tranquila, para desconectarse.

Una playa tranquila, bordeada por un alto acantilado que, en algunos tramos, dibuja cuevas y hondonadas. Arena dorada y rocas dispersas aquí y allá, que invitan a sentarse para mirar el mar.

Así es La Rinconada, un sector ubicado sobre el acceso norte de Las Grutas que, además, es uno de los elegidos por los amantes de los buenos piques, que encuentran en su costa el hábitat de pejerreyes, sargos y pesca variada, para llenar los baldes durante las tardes o las nochecitas que dedican a probar suerte con la caña.

El lugar es uno de los que se queda ‘casi’ sin playa durante la pleamar, por eso hay que estar muy atentos a la tabla de mareas, para aprovechar al máximo la visita. En esos momentos en los que el agua está bien arriba es el turno, justamente, de los pescadores, que, acodados en las escalinatas, lanzan sus líneas a la costa.

Durante la bajamar el paisaje es bien distinto, porque se devela una extensa superficie rocosa (la restinga) que permite ver la vida que palpita bajo el agua. Algas, esponjas, estrellas marinas y cangrejos son sólo algunos de los tesoros que puede descubrir el que aprovecha para realizar una caminata por la orilla.

Más allá de la belleza del paisaje, el sector cuenta con un parador que funciona durante todo el día, por eso desayunar mirando la vista o cenar algo fresco acompañado de una cerveza fría está dentro de las opciones para aprovechar.

Allí, de 11’ de la mañana a 1 de la madrugada, tienen bebidas y comestibles a la venta, y también existe un restaurante que ofrece desde meriendas hasta ricas comidas, que priorizan la pesca del día.

En ese restó el salmón blanco con guarnición sale $6800, el mero (con acompañamiento a elección) $5500, el lenguado con ensalada, papas u otras opciones $5900, el abadejo está $7900, el pejerrey $3500 y la merluza está $4900. Para los que prefieren el pollo, a la plancha con guarnición sale $4900, una hamburguesa se cotiza $4900, una ensalada mixta $3500 y un tostado $3000.

Ideal para compartir un almuerzo o una sabrosa cena, sin despegarse del agua.

Este contenido fue originalmente publicado en RÍO NEGRO y se republica como parte del programa «Periodismo Humano», una alianza por el periodismo de calidad entre RÍO NEGRO y RED/ACCIÓN.