La visión dinámica que propone la resiliencia hace que uno de sus principales riesgos es que su aceptación como característica deseable puede fomentar la tolerancia política y social a los desastres y sus impactos en lugar de abordar sus causas.
La gestión sostenible del agua es un proceso complejo y multidisciplinario. Para ello, será necesario fomentar una cultura de uso responsable del agua en todos los ámbitos: agrícola, industrial y doméstico.
Como divulgadora científica, visito numerosos colegios e institutos para impartir charlas sobre contaminación atmosférica y cambio climático. Me sorprende gratamente descubrir que muchos niños y adolescentes están familiarizados con los pequeños gestos que podemos realizar como ciudadanos para proteger el medio ambiente.
Argentina fue uno de los países más afectados económicamente por la sequía, principalmente en el sector agroexportador. Una de las principales causas fue el fenómeno climático de “La Niña”, a su vez agravado por el cambio climático.
