Con impronta pop, Claudio Roncoli construye una crítica al consumismo y al trazado urbano - RED/ACCIÓN

Con impronta pop, Claudio Roncoli construye una crítica al consumismo y al trazado urbano

 Una iniciativa de Dircoms + RED/ACCION

El artista está exponiendo su muestra "Remixed" en la galería OdA -Oficinas de Arte- y podrá visitarse hasta el 7 de septiembre con entrada gratuita en Paraná 759, piso 1, CABA.

Con impronta pop, Claudio Roncoli construye una crítica al consumismo y al trazado urbano

La recién inaugurada muestra "Remixed" marca el regreso a Buenos Aires del artista Claudio Roncoli, quien presenta ahora un nuevo proyecto en curso que lo llevó desde sus conocidas obras pop a trabajar, tras su experiencia en Estados Unidos, sobre el concepto de vacío existencial con "Empty project", que entre otras derivaciones explora los logos de negocios de comida rápida estadounidense como símbolos del centro de la vida social y reflexiona con mirada crítica sobre la relación que establecemos con las ciudades que habitamos.

Presentada en la galería OdA -Oficinas de Arte- con curaduría de Luciana García Belbey, las obras reflejan las investigaciones y síntesis realizadas por Roncoli (Buenos Aires, 1971), un artista formado en la Prilidiano Pueyrredón, que estudió serigrafía con Andrea Moccio y luego con Miguel Lescano en Perú, dedicado al diseño, también es músico, y productor musical.

La muestra reúne parte de la producción más reciente de la nueva etapa de "Empty Project", junto con algunas piezas seminales, como indica la curadora. Pinturas, collages, serigrafías y música electrónica, de un proyecto mayor que ostenta también fotografías, objetos intervenidos, videos, murales, instalaciones y esculturas al estilo de tótems de metal o madera, de dos a seis metros: esculturas donde sintetiza logos del fast food porque "ahora adoramos las marcas y llenamos el estómago, pero no el alma. Llenamos el clóset de zapatos y no la biblioteca de libros", decía el artista a Télam.

"'Empty Project' da cuenta de los complejos procesos de urbanización que se dan en las grandes metrópolis en el actual contexto global, y analiza, con la mirada crítica que caracteriza al artista, la relación que establecemos con las ciudades que habitamos", especifica la curadora.

Roncoli: "Ahora adoramos las marcas y llenamos el estómago, pero no el alma. Llenamos el clóset de zapatos y no la biblioteca de libros" / Foto: Victoria Gesualdi.

De hecho, el proyecto comenzó al observar Roncoli cómo "los centros urbanos giran en torno a lo comercial en Estados Unidos" tras migrar a ese país hace unos 10 años, a diferencia de la traza más tradicional que se da en las ciudades de Argentina, por ejemplo, con su plaza principal, iglesia y municipalidad.

"Siempre digo que la vieja traza es sociocultural. Uno ahí sociabilizaba, estaba la biblioteca, la municipalidad, el barcito, la iglesia o la sinagoga... ahora lamentablemente todo se arma en torno a lo comercial", explica el artista sobre la génesis de su proyecto que conlleva una crítica al consumismo.

Sobre una de las paredes de la galería expone su instalación realizada con impresión 3D "No somos felices pero tenes un fast food cerca", que evidencia "algo que lamentablemente pasa mucho y está pasando acá: primero se arma lo comercial y después lo sociocultural", dice.

Según ejemplifica Roncoli, hoy "si no comprás un departamento en ese tipo de village no sos feliz", mientras que antes, "primero se pensaba en el parque, el lugar donde pudieran sentarse en el pasto los que tuvieran 10 o 1000 pesos en el bolsillo", grafica para dar idea de cómo se fue diluyendo la perspectiva de lo comunitario: "La comunidad era muy importante. Ahora se piensa qué tiene en el bolsillo la comunidad para ver qué le puedo vender", asegura.

"Cuando me mudé a Miami me pasó eso, vi una gran diferencia con Latinoamérica. Eso me choca bastante porque soy una persona a la que le encanta caminar, y con las nuevas trazas (con lo comercial como centro de la vida) empieza a cambiar todo: la salud, el humor de la gente, los nervios, el estrés, todo se modifica con el smog, el ruido, y de todo eso habla esta muestra", explica Roncoli.

Roncoli: "En la muestra hay serigrafía, impresión 3D, tela, estampado, acrílico, hay de todo" / Foto: Victoria Gesualdi.

Pero esas geometrizaciones y síntesis de los locales íconos fast food, además de las trazas de comerciales de la ciudad emblemática de la península de La Florida, están sucediendo en Buenos Aires, según el artista. "'No somos felices ...' está basada en Buenos Aires, en el mapa que vemos desde arriba de la ciudad. Cada vez hay más lugares comerciales y no hay tantas plazas, no hay parques, ya no se construyen", observa.

A partir de este contraste comienza "Empty project, el proyecto vacío", pero ¿cómo salir de ese vacío? "Los extremos son malos -indica Roncoli-. Tengo puestas unas zapatillas de tal marca, con mi hijo vamos a comer pollo frito y nos encanta, pero no pasa por ahí la felicidad, sino por el momento que paso con mi hijo, o la felicidad de que puedo comprar esa comida. No por eso soy más importante que otro. Vivimos en un país con mucho resentimiento del que le va bien o le va mal. Entonces, hasta que no se termine eso el país no va a cambiar y menos el mundo", reflexiona el artista y músico.

"La música para mí es como un escape, un respiro. Es algo que hago que me complementa. Por ahí, cuando alguien tiene que descansar lee un libro o ve una serie, yo hago música, me fascina. A veces obviamente lo aplica a esto (lo visual). Hace unos 10 años hice una serie de serigrafías que se llamaba 'El rock salvó mi vida', donde tomé frases de músicos de los 80, argentinos, y generé una imagen por cada frase, unas 15".

"No me gusta esa cosa endogámica de quedarse solo en el gueto del arte o de la música. Me aburre, soy muy inquieto, y de hecho en la muestra hay serigrafía, impresión 3D, tela, estampado, acrílico, hay de todo", dice Roncoli.

Por otro lado, a este artista catalogado por la curadora como una figura del DJ en base a los dichos del crítico de arte Nicolás Bourriaud de que “la postproducción es la forma contemporánea de ese juego”, lo inspiran entre otras cosas las “nuevas tecnologías", aunque destaca que "la tecnología es una herramienta, no una dependencia, porque lamentablemente la mayoría de las personas lo tienen como modo de felicidad". Y amplía: "Siempre lo tomé como una herramienta, desde que empezaron los primeros escáneres, las cámaras digitales o los celulares, me parece fascinante. Expuse en Corea y todos los detalles de la muestra fueron por WhatsApp, algo que antes no se podía hacer".

El artista está llevando a cabo una nueva investigación sobre desarrollos urbanos en Argentina / Foto: Victoria Gesualdi.

“El artista empezó en los 90 y lo podemos ubicar dentro de los que trabajan desde las operaciones conceptuales, la apropiación, la cita, los guiños al pasado, al diseño, arquitectura, y un poco esto de trabajar muy libremente que es también bastante característico del arte contemporáneo de trabajar con mucha libertad en fusionar y mezclar corrientes, como esto de los geométricos con lo pop es algo muy propio de nuestro tiempo”, explica García Belbey.

"Empty Project" habla de cómo se arman las ciudades hoy en día con sus estacionamientos o centros comerciales en el foco. Ese vacío del que da cuenta Roncoli también es acompañado por una una playlist curada especialmente como parte de esa mezcla donde conviven el diseño, las geometrías, el collage o las técnicas mixtas. Allí también introduce la iconografía del árbol y los pájaros como metáfora de resistencia del mundo natural, y ostenta el "sueño americano", la pervivencia del diseño y la publicidad como juego poético.

En “Remixed” se presenta esa reflexión de cómo cambió su producción cuando emigró a Estados Unidos, desde su obra más conocida ligada al arte pop y su trabajo en el mundo del diseño y la publicidad, de donde “viene esta fascinación por la imagen ligada a los inicios de la publicidad, la iconografía más mid century”, dice la curadora refiriéndose con esto último al estilo modernista de la arquitectura y el diseño de mediados del siglo pasado. Y agrega que “esos primeros años los transitó con una obra ligada a lo pop, el diseño y la publicidad, pero cuando se fue a Estados Unidos empezó a trabajar con el proyecto Empty Project´, y cambió radicalmente su obra” .

VIDA Y OBRA

Roncoli, quien reside entre Buenos Aires, Miami y México, ganó dos Grammy, un LatinGrammy (2017) y un Grammy Awards (2018) al mejor director de arte en Packaging Records Design por la misma tapa de disco.

Sus obras han sido expuestas en galerías de arte, museos y ferias de arte en Argentina, Uruguay, Brasil, Bolivia, Perú, México, Estados Unidos, Corea del Sur, Cuba, Holanda, Italia y España.

La obra de Roncoli se volcó más hacia la abstracción con la que siempre había “coqueteado”, con “series previas en donde una que otra trama o forma geométrica aparecía, pero más ligada al diseño".

Según la curadora, lo que se observa es “la figura geométrica como una estructura para sus obras que se basan justamente en logos de grandes corporaciones y en arquitecturas”, donde se produce “el mix entre lo geométrico y estas incorporaciones de iconografía publicitaria ligada a lo urbano (del siglo pasado)”.

La iconografía en la cual se detiene Roncoli data de la década de 1960 en Estados Unidos con la urbanización en los suburbios, aunque luego llegará al país hacia los 90. El artista primero investigó “cómo era el típico sistema constructivo de los barrios suburbanos de Estados Unidos y ahí llega a la construcción Rambler” que se observa en una serie producida en madera. García Belbey remarca esa fascinación que le despertó a Roncoli “la estandarización, homogeneización de las casas construidas modularmente, prototípicas y estandarizadas”. Y en esta línea, adelantó que el artista está llevando a cabo una nueva investigación sobre desarrollos urbanos en Argentina.

"Remixed" podrá visitarse hasta el 7 de septiembre en la galería OdA oficinas de arte (Paraná 759, piso 1, CABA), con entrada gratuita.