Por el avance de la crisis climática, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) comenzará a medir el impacto que hay entre la economía y el ambiente en el país. Se trata del primer Sistema de Cuentas Ambientales y Económicas (SCAE) que buscará ayudar a las distintas áreas del Estado a tomar decisiones en relación a las políticas ambientales con más y mejor información.
La falta de datos oficiales sobre el impacto ambiental en las distintas provincias genera que los gobiernos no puedan definir estrategias para resolver los problemas que perjudican a los territorios y su entorno. Un ejemplo claro de esto es que en el análisis del Producto Interno Bruto (PIB) no se toma en cuenta la información relacionada al impacto del monocultivo y la degradación del suelo.
Asimismo, el objetivo del INDEC es comenzar a incorporar un relevamiento certero en la evaluación de los suelos y el extractivismo a nivel nacional para controlar el impacto ambiental en cada región.
“Cada área de gobierno, cada ministerio, cada provincia, podrá tomar decisiones con información mucho más robusta”, declaró Pablo Ceballos, director del Sistema Estadístico Nacional (SEN) en un encuentro para abordar los desafíos de los entes estadísticos de todo el mundo en el que se anunció el nuevo sistema de relevamiento ambiental y económico.
A su vez, el funcionario señaló que es importante distinguir la estadística ambiental en relación a la contabilidad económica para alinearse a “las metodologías internacionales” y enfocarse en las evaluaciones del agua, el suelo, el aire y los bosques.
El trabajo de monitoreo llevará varios años, pero ya se constituyó el primer equipo de trabajo que se encargará de identificar y recopilar las estadísticas de otras entidades oficiales y comenzará a contactar a otras áreas estatales para mejorar la base de datos en materia ambiental.
Según indicó Ceballos en la misma conferencia, luego de recabar los datos, el INDEC trabajará en el Marco para el Desarrollo de Estadísticas Ambientales (MDEA) que recopila datos de seis componentes estadísticos en base al estado ambiental de cada territorio.
Finalmente, el último paso será avanzar en el Sistema de Contabilidad Ambiental y Económica SCAE, un régimen adoptado en 2012 por la Naciones Unidas (ONU) para presentar datos estadísticos sobre ambiente a nivel internacional.
